miércoles, 5 de agosto de 2009

Acreedores de Doe Run no creen que hallarán solución en Indecopi

Por: Manuel Marticorena
¿Cuál será el futuro de Doe Run Perú? A ciencia cierta nadie lo sabe. Pese a que el pasado viernes la empresa se acogió a un procedimiento concursal en Indecopi y que este recién fue conocido por el Ministerio de Energía y Minas el lunes, a Doe Run le queda un extenso recorrido en busca de nuevamente ser una empresa viable.
La empresa tiene una deuda de unos US$120 millones, de los cuales US$110 corresponden a sus proveedores mineros: Sociedad Minera El Brocal, Compañía de Minas Buenaventura, Glencore y Cormin. La participación de estas empresas es fundamental para que Doe Run continúe operando, pues si estas se niegan a seguir abasteciéndola de concentrados su operatividad sería casi imposible.
Sin embargo, la confianza de los acreedores en lo que se pueda conseguir en Indecopi, una vez que este organismo acepte a procedimiento concursal preventivo a Doe Run, no es el de las mejores. El responsable legal de Compañía de Minas Buenaventura, José Miguel Morales, indica que existe desconfianza por parte de los acreedores, sobre todo porque la empresa ha incumplido reiteradas veces sus compromisos asumidos con estas empresas.
Carlos Gálvez, gerente financiero de la misma empresa, sostiene que todo dependerá de quienes conformen la junta de acreedores del proceso. “Si el manejo lo sigue teniendo gente de Doe Run, no vamos a entregar más material (concentrados) porque sería incrementar el riesgo”, explicó
Un ejecutivo de una empresa acreedora que prefirió mantenerse en el anonimato indicó que ingresar al Indecopi significaría seguir manteniendo estancada la deuda que tiene Doe Run con su empresa. Pero no solo eso, sino que además implicaría extenderle el crédito para lograr que Doe Run logre salir nuevamente a flote.
Hoy por la mañana varios acreedores de Doe Run se reunirían para discutir lo que harán frente a la situación a la que sorpresivamente los ha expuesto Doe Run.
PROTEGER ACTIVOSPor su parte, el vicepresidente corporativo de asuntos ambientales de Doe Run, José Mogrovejo, indicó que el hecho de pedir a Indecopi que inicie un procedimiento concursal no es porque la minera se encuentre en quiebra sino para proteger los activos de la empresa. Según Mogrovejo, varios de los acreedores de Doe Run iniciaron procesos judiciales para cobrar sus deudas que, de ser exitosos, podrían bloquear el accionar de la empresa.
Al respecto, indicó que en forma independiente al proceso concursal continuarán dialogando con los proveedores mineros para hallar una solución a la crisis de la empresa y que se retome la producción minera en La Oroya, detenida hace dos meses.
Mogrovejo indicó que hoy los acreedores presentarían una nueva propuesta al Ministerio de Energía y Minas (MEM) para salir de esta situación y reactivar la empresa. Sin embargo, en el MEM no había reunión programada ni con el ministro Pedro Sánchez ni con en el viceministro de Minas, Fernando Gala.
Asimismo, Mogrovejo explicó que el MEM aceptó ampliar el Programa de Adecuación y Manejo Ambiental (PAMA) si la empresa presenta una carta de algún banco que acepte financiar los US$150 millones del PAMA. De hacerlo, le ampliaría esta obligación por 30 meses. “Obviamente no vamos a necesitar tanto tiempo, pero las entidades bancarias están pidiendo este plazo”, dijo, aunque esto no fue confirmado por el MEM .
El cumplimiento del PAMA reducirá la contaminación en La Oroya, producto de las emisiones que realiza la fundición de esta empresa. El plazo dado por el Gobierno para la culminación de este compromiso ambiental vence el 31 de octubre. Si la empresa no logra ampliarlo, Osinergmin iniciaría un proceso de cese de operaciones.
Mogrovejo dijo que si se logra un acuerdo con el Gobierno (respecto del PAMA) y con los acreedores, es posible que se deje sin efecto el pedido de declaración de insolvencia ante al Indecopi.
PROCESO
De otro lado, diferentes especialistas en temas concursales indicaron que el proceso para la formación de una junta de acreedores en Doe Run no tomaría menos de seis meses por el grado de complejidad de las deudas que debe tener Doe Run.
El abogado Alfredo Bullard, del estudio Bullard, Falla y Ezcurra, dijo que los acreedores y la empresa podrían llegar a un acuerdo independientemente del proceso que se lleve adelante en Indecopi. Por su parte, Juan García Montúfar del estudio Rubio, Leguía, Normand & Asociados, explicó que si los acreedores así lo decidieran podrían cambiar la administración de la empresa, o incluso liquidarla para tratar de recuperar parte de sus deudas. Pero todo esto se sabrá dentro de aproximadamente medio año, cuando se forme la junta de acreedores.

Acreedores contra el ingreso de Doe Run al Indecopi

¿Cuál será el futuro de Doe Run Perú? A ciencia cierta nadie lo sabe. Pese a que el pasado viernes la empresa se acogió a un procedimiento concursal en Indecopi y que este recién fue conocido por el Ministerio de Energía y Minas el lunes, a Doe Run le queda un extenso recorrido en busca de nuevamente ser una empresa viable.
La empresa tiene una deuda de unos US$120 millones, de los cuales US$110 corresponden a sus proveedores mineros: Sociedad Minera El Brocal, Compañía de Minas Buenaventura, Glencore y Cormin. La participación de estas empresas es fundamental para que Doe Run continúe operando, pues si estas se niegan a seguir abasteciéndola de concentrados su operatividad sería casi imposible.
Sin embargo, la confianza de los acreedores en lo que se pueda conseguir en Indecopi, una vez que este organismo acepte a procedimiento concursal preventivo a Doe Run, no es el de las mejores. El responsable legal de Compañía de Minas Buenaventura, José Miguel Morales, indica que existe desconfianza por parte de los acreedores, sobre todo porque la empresa ha incumplido reiteradas veces sus compromisos asumidos con estas empresas.
Carlos Gálvez, gerente financiero de la misma empresa, sostiene que todo dependerá de quienes conformen la junta de acreedores del proceso. “Si el manejo lo sigue teniendo gente de Doe Run, no vamos a entregar más material (concentrados) porque sería incrementar el riesgo”, explicó
Un ejecutivo de una empresa acreedora que prefirió mantenerse en el anonimato indicó que ingresar al Indecopi significaría seguir manteniendo estancada la deuda que tiene Doe Run con su empresa. Pero no solo eso, sino que además implicaría extenderle el crédito para lograr que Doe Run logre salir nuevamente a flote.
Hoy por la mañana varios acreedores de Doe Run se reunirían para discutir lo que harán frente a la situación a la que sorpresivamente los ha expuesto Doe Run.
PROTEGER ACTIVOS
Por su parte, el vicepresidente corporativo de asuntos ambientales de Doe Run, José Mogrovejo, indicó que el hecho de pedir a Indecopi que inicie un procedimiento concursal no es porque la minera se encuentre en quiebra sino para proteger los activos de la empresa. Según Mogrovejo, varios de los acreedores de Doe Run iniciaron procesos judiciales para cobrar sus deudas que, de ser exitosos, podrían bloquear el accionar de la empresa.
Al respecto, indicó que en forma independiente al proceso concursal continuarán dialogando con los proveedores mineros para hallar una solución a la crisis de la empresa y que se retome la producción minera en La Oroya, detenida hace dos meses.
Mogrovejo indicó que hoy los acreedores presentarían una nueva propuesta al Ministerio de Energía y Minas (MEM) para salir de esta situación y reactivar la empresa. Sin embargo, en el MEM no había reunión programada ni con el ministro Pedro Sánchez ni con en el viceministro de Minas, Fernando Gala.
Asimismo, Mogrovejo explicó que el MEM aceptó ampliar el Programa de Adecuación y Manejo Ambiental (PAMA) si la empresa presenta una carta de algún banco que acepte financiar los US$150 millones del PAMA. De hacerlo, le ampliaría esta obligación por 30 meses. “Obviamente no vamos a necesitar tanto tiempo, pero las entidades bancarias están pidiendo este plazo”, dijo, aunque esto no fue confirmado por el MEM .
El cumplimiento del PAMA reducirá la contaminación en La Oroya, producto de las emisiones que realiza la fundición de esta empresa. El plazo dado por el Gobierno para la culminación de este compromiso ambiental vence el 31 de octubre. Si la empresa no logra ampliarlo, Osinergmin iniciaría un proceso de cese de operaciones.
Mogrovejo dijo que si se logra un acuerdo con el Gobierno (respecto del PAMA) y con los acreedores, es posible que se deje sin efecto el pedido de declaración de insolvencia ante al Indecopi.
PROCESO
De otro lado, diferentes especialistas en temas concursales indicaron que el proceso para la formación de una junta de acreedores en Doe Run no tomaría menos de seis meses por el grado de complejidad de las deudas que debe tener Doe Run.
El abogado Alfredo Bullard, del estudio Bullard, Falla y Ezcurra, dijo que los acreedores y la empresa podrían llegar a un acuerdo independientemente del proceso que se lleve adelante en Indecopi. Por su parte, Juan García Montúfar del estudio Rubio, Leguía, Normand & Asociados, explicó que si los acreedores así lo decidieran podrían cambiar la administración de la empresa, o incluso liquidarla para tratar de recuperar parte de sus deudas. Pero todo esto se sabrá dentro de aproximadamente medio año, cuando se forme la junta de acreedores.